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Los budistas tibetanos consideran que las enfermedades graves, como el cáncer, pueden ser un aviso y hay una esperanza muy real de curación de todo el ser si tomamos en serio ciertos aspectos profundos de nuestro ser, como la vida espiritual, y cambiamos radicalmente el rumbo de la vida.

Exploraremos la senda de la curación en este retiro desde una perspectiva espiritual y emocional, apoyada en la experiencia de Alain al superar un cáncer terminal. ¿Podemos contribuir a nuestra propia sanación con la mente? ¿Cuáles son los distintos planteamientos y cómo podemos entenderlos? Se tratarán cuatro temas principales sobre la sanación:

  • Nuestra naturaleza fundamental, fuente de curación
  • La meditación: una práctica para sanar el ser
  • Descubrir el amor en nuestro interior, aceptándonos y reconciliándonos
  • Visualizar e invocar para sanar nuestro ser

Las prácticas de meditación, compasión y visualización pueden contribuir a desbloquear el potencial transformador de la sanación y permitir, por tanto, que el cuerpo y la mente asimile mejor los tratamientos necesarios para curarnos. 

Se trata de un planteamiento que incorpora una visión holística de todo el sufrimiento, físico, mental y emocional. Entiende la curación desde el punto de vista del ser completo, no sólo desde el punto de vista del cuerpo. Da igual que el cuerpo muera o viva, es posible contar con una experiencia de curación y así prepararnos mejor para la muerte.

IMPORTANTE:  En caso de enfermedad grave, los maestros tibetanos recomienda utilizar el planteamiento espiritual junto al tratamiento médico que corresponda.